CRÓNICA: Sant Vicenç de Castellet- Pont de Vilomara

Habíamos quedado a las 7:00 en la estación de los FFCC, no iba a venir mucha gente, por lo visto se han enterado de que salía yo y han pasado de ir... Malditos! A toda prisa llego a la estación, veo a un biker por allí abajo que no había visto nunca…. Y con el tiempo justo hecho la bici al hombro y subo las escaleras corriendo para coger el ticket del tren. Cuando llego arriba escucho que me llama Albert acompañado del biker misterioso, era Juan!! Preparamos el equipaje y nos subimos al tren dirección a Sant Vicenç de Castellet. Por el camino recogemos a Manuel, que hacía tiempo que no pedaleábamos con él, y fue una alegría verlo!!

Llegamos a Castellgalí a eso de las 7:50, todavía era de noche, y el frío no era demasiado intenso. Ponemos en marcha el GPS y Albert me pregunta el sentido de la ruta, vaya pregunta sin sentido, si es que le falta parte del quinto sentido… no te enfades, que eres muy sentido. XDDD Cojo el móvil, reviso la ruta en wikiloc y empezamos la salida. Al principio un poco perdios, el track tenía pocos puntos y el trayecto tenía muchas variantes. Uno iba por la izquierda, el otro por la derecha, otro por el centro y yo mismo por el suelo… No me vio nadie, pero en un giro de 180º para coger el camino adecuado me patinaron las ruedas con el barro y me fui al hierbaje. Jejejeje Empiezan los senderos y las trialeras, todo diversión… pero no sé que me pasaba… empecé flojo, cuando veía un escalón un poco pronunciado me hacía caquita, vaya cagao! XDDDD Poco a poco fui cogiendo confianza. La ruta era una montaña rusa, habían subidas y bajadas muy pronunciadas por doquier. Que dureza! Después de casi un mes de medio parón, habían subidas que se me atragantaban.

Pasamos por una zona de sendero con barranco incluido y Manuel que iba con los dos ojos puestos en el barranco no se dio cuenta que había perdido el pulsómetro! Hicimos una parada cerca de una choza hobbit para intentar buscarlo pero no hubo manera. Ahora como le contará a los hijos del Alex los casi 7000km que llevaba. Cagoento!!

Después del momento triste de la salida nos encontramos con una trailera descomunal, que aún no se como la baje, pero lo que está claro es que Albert y Juan la disfrutaron como nadie. No como Nadie, en plan David Jimenez, como nadie de nadie. Jejejeje Seguimos con la adrenalina a full para seguir bajando por otra zona deslizante de bajada. Manuel que la intentaba bajar, a su estilo, to the Manuel Style, con un pie anclado y otro apoyado en el suelo, se dio un revolcón por el hierbaje. Y vamos dos! Seguimos la bajada, y ahora le tocaba a Juan. Se metió en un “rierot” deslizable y hundible por la cantidad de barro que había y bajo como si de un tobogán se tratase. Van 3 y vamos para bingo señores!! Esa zona estaba muy embarrada y había que ir con mucho ojo. Habíamos pasado el ecuador de la salida y hicimos la parada para almorzar en Minas Tirith, pero no sin antes hacer una ruta turística por todo el complejo. Albert que buscaba el sitio más apropiado no hacía más que darnos vueltas y vueltas. Nos comemos los refrigerios, quitamos un poco el barro de los cambios y proseguimos el camino sin saber que nos esperaba…

Lo que nos esperaba era una subida muy larga y dura, como… bueno, ya me entendéis… XDDD Baje un poco el ritmo, porque ya tenía las piernas bastante cargadas, me quedé unos metros atrás. Más vale prevenir que sufrir al final… pero Albert que no entiende de eso, esperaba con una sonrisa y una pregunta típica de “Que pasa? Estas cansado?”… y lo que no sabe es que a todo monguer le llega su Sant Monguín. Seguimos subiendo más y más, ahora por senderos rocosos, a darlo todo y a quemar el último cartucho, no debería quedar mucho para llegar. Se divisa el cambio de rasante a lo lejos y empezamos la bajada final por senderos. Tramo increíble para despedirnos de la salida a toda velocidad y con rocajes incluidos. Puedo divisar a unos metros a Albert que se intenta meter entre dos rocas y besa el suelo. Bingo! Level Complete! XDDDD Llegamos al Pont de Vilomara y toca el último tramo de carretera. Parecía que íbamos bien de tiempo y podríamos coger el tren de las 12:30. Yuju!! Empezamos a tirar y de pronto no veo al Albert. El carma se había cebao con él, le entró una rampa a lo Nadal en el muslo. Yo que me preocupo por los míos iba a llamar al Samur… al Richar, al Kevin, al Josel… a cuantos más mejor, para que vean que el puto Albert es humano! Llegamos al tren y nos despedimos de esta salida con una bonita foto de Manuel hondeando la bandera de MBC! MBC! MBC!

Rubén Casado
Redactor de Mbc Bike