Después de estar toda la tarde tirado en el sofá absorto en la caja tonta, miro el reloj y ya voy justo de tiempo… Reviso luces, GPS, bebida… y salgo a la calle, ya de noche, dispuesto a hacer la primera nocturna del verano. El objetivo de la salida es hacer la Transiberiana que nos llevará a visitar el parque natural de Collserola.
Eran las 21:30 cuando habíamos quedado Albert G., Albert N., Erik y yo, que llego 10 minutos tarde. Cagoen!! Revisamos las luces y salvo Erik todos íbamos con las Natural Chine, made in China, que dan más luz que el foco de Batman.
La ruta empieza por el río y los Albert’s ,que iban tarde a algún sitio, aprietan a marchas endemoniadas. Deberían ir a 70 o 80 km/h porque Erik y yo íbamos a 35 km/h y no había manera de pillarlos. Malditas bicis a gasolina!
Al llegar a Molins de Rei, mientras Albert N. nos quería confundir por otro camino, Erik comentaba que ya le quedaba poca agua… Estuvimos buscando fuentes por Molins y cuando abre la mochila tenía el Camelbak casi a tope de agua. MBC!!
Después de estos incisos ya estábamos a pie de camino para empezar la Transiberianocturna!!
La ruta nos llevaba por senderos y pistas custodiada por jabalíes. Por suerte no salió ninguno pero hubo un momento que al hacer una parada para consultar el GPS se escuchaban unos movimientos muy cerca del camino. De pronto Albert G. Y Erik encontraron milagrosamente el camino. El miedo hace que pienses más rápido...
En varios kilómetros llegamos a la Creu de l’Olorda y para nuestro disfrute vimos que estaban haciendo un concierto al aire libre de jazz. Cogimos unas cervecitas en el bar, y una coca-cola para el pandillero, y al unísono de Albert N. aplaudimos y gritamos “RABO!! RABOOOO!!” a tan fantástica actuación.
Cuando las cervezas llegaron a su fin bajamos a toda velocidad por pista hasta Molins de Rei para coger el camino del río y volver a Martorell. Los Albert’s volvieron a apretar a velocidades insospechadas mientras Erik echaba una cabezadita por el camino y yo iba sacando la lengua.
La ruta ha sido muy divertida y seguro que haremos de día para contemplar sus paisajes con más claridad. Ya en Martorell tuvimos invitados sorpresa... entre ellos a Alex y a Batman que buscaba su foco. ;)
Ruta que iniciamos por el río Llobregat para llegar hasta Molins de Rei donde comenzamos la Transiberiana... en modo noche. En el camino encontramos pistas, senderos muy entretenidos y algún jabalí con ganas de hacer amigos. Aún habiendo pasado un rato muy bueno, no pudimos apreciar demasiado el paisaje ya que era de noche, pero seguro que volveremos de día para disfrutarlo.
La mañana empezó al alba. A las 7:00 quedé con mi amigo “Dummy” Albert para recogerlo en su casa, que no cogerlo…Mientras él bajaba me comí una bolsa de medio quilo de pistachos XXL de California. No se que hacía, quizás un mantenimiento completo de la bici. No como yo que nada más empezar tuve que ir apretando la manera del freno posterior intermitentemente para no rallarme con los chirridos de mis fórmula… pero eso no son problemas si el circuito te hace dibujar una sonrisa cada cinco minutos! :)
A las 7:20 salimos hacia el pueblo madre de una de las cursas más cañeras que existen sobre la Tierra, Sallent, madre de la Diferent! Recorridos de XC fusionados con Enduro y también con un Bike Park! La hostia. Uno de los mejores circuitos por el que he tenido oportunidad de rodar nunca! Me falló únicamente la clara que me tomé al final de la salida. Seguramente pusieron “Hanta de Limao” (la imitación chunga de la Fanta de Limón). Es algo muy grave para alguien como yo que visualizaba una cerveza fresca y de calidad en las subidas calurosas para no fundir los plomos y desvanecer.
Al llegar al pueblo preguntamos a un abuelo con gayata donde se reunían los mozos del pueblo para salir en bici y nos señaló con el bastón un puente en el frontispicio, entonando una jota para despedirse. "Porqué las mozas de mi puebloooooooooo son tan majaaaaaaaaaas...". Emprendimos la marcha y dejamos al hombre con la jotica porque llegábamos tarde.
Finalmente encontramos el puenticico donde se había quedado para iniciar la salida. Nos bajamos del coche, montamos las bicis y saludamos a la gente que, muy cortésmente, nos enseñarían lo que escondían en sus tierras, pero vemos más bicis rígidas de la cuenta… “No hace falta que llevéis las protecciones… hoy haremos una salida suave…” A día de hoy esas palabras le continúan resonando con eco en la cabeza del Mongui Albert despertándose a altas horas de la madrugada empapado de sudor y con taquicardias….
La ruta empezó subiendo. Camino ancho durante 20 minutos y un remate final de 200 metros para sacar los higadillos. Un tramo de bosque tapado y serpenteante empezó a despertarnos. “Parar un momento he pinchado!”, gritó un Monguer. Venga a parar por culpa de un inútil sin tubeless...
Arreglado el problema con ayuda de medio pelotón (como tiene que ser). Seguimos hasta llegar a una bajada que me recordó a un tramos del circuito Superenduro Martorell. Bajada muy pronunciada por un tendido eléctrico. Enduro a tope y primeras fotos a cargo de los bikers de la organización!
Bajamos por camino ancho. Me pego a una bicicleta rígida con trazada perfecta. Surcos en el suelo, alguna zarza atrapaciclistas y ardillas lanzando piñas. Subimos otro trozo y llegamos a un cruze con un saltico donde demostramos lo maricabikers que estamos echos saltando dos palmos jua jua jua. Pero nos reímos un rato calentando motores.
Subiendo un pequeño tramo por camino ancho, llegamos a una Masía (cortijo si lo traducimos al castellano). Oímos unos fuertes rugidos que provenían de una gran balsa redonda llena de patos sarnosos y truchas mutantes. Albert y yo vimos como Manolo se acercaba a un punto concreto del margen del charco y hablaba dulcemente con alguien o algo...Al acercarnos, pudimos ver a una enorme bestia ancestral! Un cocodriló Habiahaí. Tomando el sol en la orilla nos miraba fíjamente. De pronto, se acercó un hombre de campo de mediana edad, gafas Top Gun y puro Hannibal Smith del “Equipo A”… “Vigileu que aquest encara no ha esmorçat!”
La ruta continuaba ascendiendo por dos pequeñas variantes, trialera patinosa o camino arenoso... Al cabo de unos minutos llegamos a una pedazo de trialera de enduro llamada “El Libro” en la que la mayoría de los participantes la bajaron a pie y todo hay que decir que los que íbamos invitados, (los Monguers de MBC) dejamos bien alto el listón del enduro tranquilamente. El él bajamos algún trozo donde una caída hubiese sido fatal para la salud general de nuestro aparato locomotor… aunque también habían trozos imposibles hasta para nosotras!
Llegamos a una balconada ancha de roca. Menudas vistas! Se podía ver toda la explanada de... de... toda la explanada! Una avioneta de “MBC Promociones” tiraba tazas de cerámica con nuestro logotipo desde 300 metros de altitud rompiéndose a cada impacto con el suelo o rompiendo cabezas y dejando a la gente con una nansa (asa en castellano) detrás de la cabeza...MBC!!!
Habiendo llegado a un segundo balcón de piedra y cantos afilados. Sacamos los bocadillos y nos comimos hasta los papeles de plata. Fotos al “Filo de lo Imposible”. Continuamos por una trialera que desciende y se complica. Consigo salir airoso. Albert logra grabar en directo un material de unas caídas sin consecuencias (Próximamente en los mejores cines…). Contento de la desgracia ajena seguimos por un sube y baja trialerístico. Plato pequeño donde estás! Nos recreamos haciendo fotos en un cambio de rasante que baja abruptamente. Todo el mundo se lo pasa bien haciendo equilibrios o mirándolos.
Llegamos a la zona cero, Curvas de infarto con giros casi imposibles, escaleras naturales, bajada de sobre maderas que pone nerviosa a mi bici que controlo como puedo para no aterrizar sobre la maleza y hacer un recto en una curva. Me sigue Albert. Le grito: “Dale rosca dale!” Acelera por la pasarela. Parece un biker de “Iú Es Ei”. Sale de las maderas rampa y decide enseñarnos una técnica de aterrizaje que aprendió en Vietnam cuando llevaba aviones de guerra abatidos. No pasa nada. Lleva sus protecciones...
Un chavalín del grupo raja leventente la cubierta. Le ha picado una llantis llanta. El tubelés no da a basto pero el “Ajustes” le ayuda en todo lo que puede. Me adelanto un poco y veo a uno de nuestros Sherpas saltando por los aires como en los vídeos de interné que todos deseamos protagonizar. Una rampa de lujo con un aterrizaje muy redondeado de tierra. Cogí carrerilla, pedaleé fuerte y me aferré fuertemente al manillar...Vuelo!!! Estoy volando!!! E.T. me sobrepasa dentro de su cesta con Eliot. Los rezos a Santa Mondraker me dieron suerte y las Hermanas Fox se lo tragan todo. Aterrizo y freno rápido y logro parar la bici antes de llegar a un tronco podrido. Yeeeeeeeeeaaaaahhhhhh!!! Estoy entero. Menudo subidón de adrenalina!!
Cuando llega Albert no se cree que haya saltado y le enseño lo aprendido. Mi segunda hacienda me vuelve a salir bien. Albert, que había mirado la rampa con temor piensa: Si este mongolo ha podido saltar, yo también. Lo prueba y lo consigue, su frenada no es tan fuerte y San Troncón lo recibe dándole una abrazo entre sus amiguitos los arbustos del bosque. También grita Yuhhuuu! pero un poco más apagado. Santa Felt también le ha dado suerte. Ahora somos verdaderos enduretis. Solo nos faltará que nos convaliden los saltos en el Comando Latrinca.
Seguimos. Un atajo! Nos metemos en la selva. Rodamos entre zarzales, sobre zarzales, bajo zarzales, somos zarzales, pensamos como zarzales, nos comunicamos con los zarzales y nos zarzales, zarzales, zarzales. Y algún que otros zarzál! Salimos a una carreterilla. Rodamos paralelos a una acequia. Nos pica todo.
Medio grupo se marcha al llegar a una plaza de Sallent. El otro medio ascendemos acalorados hacia un Bike Park Gratuito! Es un bike park secreto, a partir de aquí no puedo contar nada más… o tendríais que venir a Sallent. Os jodéis! Adeu.
FIN.
P.D: Hay que felicitar a Manolo & Cia. por todo lo que tienen montado ahí! Espectacular!
Salida floja la de este domingo. Pocas veces nos disponemos a hacer una nueva ruta, y la terminamos dejando a medias. Ya se intentó hacer el sábado y por culpa de las bajas de última hora del batallón monguer, se pasó al domingo a ver si tenía más éxito. Nos reunimos a las 7:30 AM en el puente del rio Anoia de Martorell. A las 7:45 recogemos a Eric a la masía Can Abad (cerca de Castellví de Rosanes). No salimos, sin que antes Albert nos deleitara con una de sus clases magistrales de mecánica. Eric estaba tan encantado que Albert le ayudara a cambiar la cámara que ni le ayudó el mamón. Eric tu si que sabes… MBC !
Seguimos camino a Gelida y seguidamente a Sant Sadurní d´Anoia, todo por caminos de pista ancha y sin grandes dificultades. Albert G. Todo y venir apenas durmiendo 2 horas, en todo momento era cabeza de grupo y escapado a la vez. Joder, creo que ganará antes Carmen de Mairena el tour de Francia y nosotros todavía no le habremos pillado el ritmo, menudo un fitipaldi está hecho el Máster, seguro que se dopa y nos lo oculta. Un día de estos le enviamos a los inspectores por sorpresa mientras esté durmiendo, a ver si le pillamos. Que nos digan la verdá !! xD
Pero poco antes de llegar a Sant Sadurní, volvemos a tener otro damnificado. Esta vez Albert se da cuenta que lleva diez minutos con la rueda trasera “tubeless” rajada. Menuda broma… ni los blandiblú de la época daban tanto asco. Cuando se dispuso a quitar la cubierta de la llanta.. pero ezo que ééé?? Una viscosidad de color verde intenso lleno de grumos semi-endurecidos, debido a la falta de hermetismo que sufría esa cámara de vete a saber cuando. Los daños éran irreparables y no quedó otra que usar una cámara para solucionar el problema. Eran las 10 de la mañana y todavía estábamos en Sant Sadurní… decidimos parar a desayunar y media vuelta otra vez para casa. Hoy nadie andaba muy motivado y el tiempo se nos estaba hechando encima. Antes de la vuelta a Martorell paramos para echar unas fotos al coche ganador del Rally Barcelona-Marruecos, y disfrutar de unas pinturas al estilo rupestre-español de los años cincuenta, donde los ciudadanos hispalenses residentes en Cataluña, no tenían ni puta idea de lo que era el catalán (San Sadurní de Noya).
De camino a casa, a la altura de Gelida, decidimos subir por el castillo, hasta la urbanización “el Safari” y de allí , caminos por senderos y alguna trialera dirección Castellví de Rosanes. Dámos por concluida la salida, dejamos a Eric y, Albert y yo, nos volvemos por carretera hasta Martorell. Nunca había bajado por la carretera vieja en bici… Albert decidió poner la directa y bajar cagando leches al más puro estil contrareloj, llegamos a alcanzar 42 km/h en la recta, para flipar…tardamos solo 2:40 min. En llegar bajo el puente de la autopista de la Vila, no está nada mal.
Un día muy ameno, con risas, clases de mecánica gratis y con el recuerdo puesto en nuestros monguers lesionados. Alejandro Hernández, Rubén Casado e Ismael Plaza, solo desearos muchos ánimos y una pronta recuperación.
Después de toda una semana azotada por la ola de calor había ganas de hacer algo fresquito, y un bañito en les Fonts de Rellinars podía ser la clave. Quedamos tempranito para que el sol no nos castigará demasiado, eran las 6:15 y ya estaba en el Pont del Diable esperando al resto de monguers. Para no perder la costumbre la puntualidad no va con ellos… y finalmente salimos a las 6:40 Albert G., Eric, Jordi y yo, a toda prisa porque nos esperaba Manuel e Isma en Olesa. Ya llegando, por la carretera de las Carpes, un conductor monguerizado nos pita apasionadamente para subirnos el calor corporal. Era el Isma que iba en coche hasta Olesa para ahorrar energía. Luego resulta que iba sobrao…
Llegamos a Olesa en poco más de 20 minutos, el Albert G. le había echado gasolina super de su coche y me llevaba con la lengua fuera. Allí estaba Manuel e Isma preparados para comenzar tan refrescante aventura. Jordi aprovecha los pocos minutos de puesta a punto de la bici de Isma para comprar unos bollicaos que todos disfrutamos… zi zeñó!! Nada más salir nos encontramos con los espartanos!! Aauuuuu!!! Allí estaban Estarqui, Charlie y Mosquito Navarro preparados para irse a Sant Vicenç del Castellet, que muy amablemente nos invitaron a ir a comernos una butifarra con ellos. Albert G., que ya está cansado de nuestras butifarradas enseguida accedió a hacerles compañía, pero llevábamos el bañador listo para pasar una mañana mojadita. ¬¬
Empezamos el trayecto con ellos y al llegar a la Puda ya perdimos el rastro de tan fuertes espartanos y eso que Estarqui se había pegado el día anterior una paliza en bici, vaya maquinas!! Al llegar a Mongistroll cogimos un senderito que nos llevó a la ermita de Sant Antoli, según Mosquito Sant Antoni, donde Isma intento subirse para buscar a su dulcinea… pero estaba muy lejos de tan preciosos parajes. Hicimos unas foticos y seguimos sendero abajo.
A los pocos minutos escuchamos “Monguers!! Monguers!!”… eran los espartanos que estaban haciendo un gabinete de crisis por las invasiones de los clanes en sus tierras. Hicimos una ofrenda para poder cruzar su territorio y con canticos sagrados nos despedimos hasta la próxima incursión… “Mbc!! Auuuuu!! Mbc!! Auuuuu!!” Seguimos nuestro trayecto hasta Rellinars por un camino muy entretenido. La ruta tenía muy buena pinta!!
Ya en Rellinars, y después de dar veinte vueltas, paramos en un bar para almorzar. Utilizaron diferentes métodos de motivación con sus manjares y sus películas autodidactas pero no iba a ser suficiente calor para aguantar el frío que cayó de golpe y la lluvia que nos mojó. Supuestamente ahora teníamos que ir a les Fonts para bañarnos, pero a ver quién era el valiente que se metía con el frío que hacía y lo que estaba lloviendo. Otra vez será…
Bajamos dirección a Vacarisses por tramos de urbanización y caminos donde habían indicaciones para acceder a “Putas Gratis”, paré a hacer una foto y me quedé sólo. Cuanta ansia!! Llegamos a un bosque donde habían puesto estratégicamente unos troncos que hacía de este un lugar muy peculiar. Aquí tuvimos nuestro momento “ponno”.
En pocos minutos, reanudamos la marcha dirección al Plà del Fideuer con la lluvia incesante. Había pasado la máquina para “arreglar” el camino y parecía el jardín del pueblo cuando van a plantar Geranios, mucha tierra suelta, genial para patinar subiendo y estupenda para pegártela bajando. Llegamos arriba como pudimos, algunos subidos y otros andando para bajar frenéticamente hasta Olesa.
Hicimos una visita a Alex, que esta convaleciente por una lesión que no voy a decir, porque si digo que tiene el huevo hinchao se va a enfadar, y nos invitaron a un aperitivo que entro como comida celestial en el paraíso de Adam. Recupérate pronto Alex!! Y tú también Isma P.!! Vaya par de huevones!! Sin demorarnos demasiado bajamos para la estación y así coger el tren de camino a casa. Nos despedimos de Isma que hizo una gran salida XC sin pestañear!
Pudimos entrar en el tren, esta vez todos, después de que Eric se peleará con el billete y… allí estaban los de Martorell Bike!! Diego, Gerard, Jesús y Seve que volvían de hacer la ruta de la Guineu, que nos recomendaron y seguramente hagamos en breve.
Al final hicimos una ruta fresquita, pero no como esperábamos, con día nublado, lluvia y frío. Llevamos los bártulos del baño en la mochila para nada! MBC!!!
Ruta que iniciamos por la carretera de las carpas hasta Olea, donde nos reagrupamos con el resto del grupo. Proseguimos por el camino de la Puda, que a pesar de llevar una semana a pleno sol todavía tiene charcos. Se hace una ascensión leve pero con alguna parte de rocas hasta llegar a Rellinaras por unos senderos muy entretenidos y recomendables.
Desde Rellinars hasta Vacarisses se coge un tramo de urbanización y carretera poco transitada, para llegar a una zona de bosque con algún detalle artístico, como podéis ver en las fotos. Sigue el trayecto para subir per el camí dels Lladres hasta el Plà del Fideuer. Hace poco ha pasado una máquina y está completamente plano y con arena suelta, cuidado bajando!! Bajamos hasta Olesa para coger los ferrocarriles y volvemos a casa.
Ruta con senderos muy guapos, con algún tramo de carretera y pensad que si la hacéis en verano la primera parte está muy destapada y el solo puede picar mucho.
